Dime niña que pretendes,
cuando busco mirarte
corres a esconderte,
cuando intento alejarme
te esfuerzas en retenerme,
cuando intento olvidarte
en mi mente te metes...
... con una sonrisa,
con una palabra,
con un pensamiento,
y de nuevo te alejas
con un requiebro.
Y no llega el día
que digas: ¡te quiero!
1 comentario:
Te salen del corazón
el dolor y el sentimiento,
y en el viento se reparten
con rimillas de recuerdo.
Pero la palabra es vida
y alienta sobre tus versos,
déjala que fluya sola
no la retengas adentro.
Habrá un día que te comprendan
y alguien te dirá te quiero.
Campo arañuelo.
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