Ella, se llamaba Soledad

Con el arrullo del mar
va cantando un marinero
y en su jipío primero
hay llanto de soledad

después viene la verdad
del interior de su pecho
y tras callar un gran trecho
vuelve a cantar y soñar.

Arrió velas. Y el barco,
iba lento por el mar
como si fuera escuchando

sobre las olas del mar
el aire que sigue hablando
al repetir Soledad.

Rompe la fuerza del viento,
marinero sobre el mar,
que el azul se beba el eco
que haya triste en tu cantar.

Autor: Eladio San Juán Brasero

He perdido el corazón

(A Nati, por nuestro primer beso)

Esta noche he perdido el corazón,
y en mi pecho ya no lo siento,
sin él estaba perdido,
sin él no era ni tenía criterio,
sin él creía estar vacío,
mas hoy ya no me lamento,
pues fuí yo quien con un beso,
te dijo: toma mi corazón,
amor mío, a tí te lo entrego...
y aún sin él, hoy me siento lleno.