¿Quién soy?... no lo sé, voy disfrazado de él

Mi foto
Me gusta la poesía, intento escribir con el corazón, la intención es el sentimiento, la pasión; si puede ser bello, tanto mejor, pero nunca es la razón.

Ay mi niña

(En revisión y desarrollo)

Ay mi niña, que no, que no,
que no encuentro explicación
que en tan menudo cuerpecito
quepa tanta sana alegría,
tanto brío, tanta ilusión...

Ay mi niña, es una sin razón,
en mis manos sólo tus manos,
las tuyas al mundo dan calor,
tus labios al mundo alientan,
a mí me quitan la respiración,

ay mi niña, ay mi amor,


ay mi niña, hoy muero de amor
que me inundas con tus besos
que me endulzas con tu candor
que me iluminas con tu mirada
que me abrasas con tu ardor

ay mi niña, ya se apaga mi voz,
ay mi vida... que hoy muero de amor

El desconsuelo

Al alma llega el desconsuelo,
que tus palabras desarman
el ferviente deseo, el anhelo,
de ser íntegro y honesto;
y sentirme un error, no más,
que ocurre otra vez, de nuevo,
y mi sino no puede evitar
parecer iracundo y colérico,
y no poderte susurrar al oído
que a pesar de mi error
por tu amor yo vivo ciego.

Roces

A tu lado enmudecen mis palabras,
se me deshilvanan los pensamientos,
porque ¿cómo recitaré en un verso
lo que el alma dijera con un beso?

En tu regazo permanece en calma
mi corazón, de los vientos protegido
olvidando que fuera malherido,
buscando un roce, el roce de tu alma...

Miedo a perderte

En tus labios, amor mío,
he besado el cielo,
en tus ojos, entre soles,
me he visto inmerso,
y de querete, amor,
he sentido un gran miedo
Y más miedo tengo,
angel mío, de no hacerlo...