¿Quién soy?... no lo sé, voy disfrazado de él

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Me gusta la poesía, intento escribir con el corazón, la intención es el sentimiento, la pasión; si puede ser bello, tanto mejor, pero nunca es la razón.

Poemas (melancolías)

No quisiera perderlas, no quisiera olvidarlas...
...quizás lleguen días que no quiera tenerlas


Mi tierra

Quisiera besar
lentamente
la dulce playa
de tu vientre,
descansando, amor,
acariciado por el sol
al abrigo de tus dunas …

Quisiera sentirme fértil
en la ansiada inquietud
de tu selva obscura…

Recorrer ese volcán, amor,
abrasándome en el calor
de tu gozosa espuma…

Quisiera ser pájaro
y volar en lo alto,
y observar
tus montañas, tus valles,
tus aguas profundas…

...y morir calladito,
escuchando el temblor
del corazón de mi tierra,
mi amor…



Brujita...


Cristalina torrentera,
alamillo de almas blancas,
de puntillas sobre el agua,
un dulce romance cantan...

Y las hojas en el viento,
y las raíces en el agua,
al compás de los versos
susurrando les acompañan..

Una carita morena,
reflejada en la calma,
el rostro de una brujita,
el corazón de un hada,
suspirando se acerca...
ante ella ya no cantan.

¿Por qué los dos,
alamillo y agua,
con suspiros callan?



Que importa

La estrella de mi corazón,
allí tan lejana,
perdida en el tiempo,
al alba de mi mañana.

Escondida entre recuerdos,
lucero que ama,
juguetea con los soles
que dirigen mi alma.

Por allí corre,
¡como el agua!
salpicando los sentimientos
y alejándose en la nada...

Y yo me iré, sin un amigo,
en una fría mañana
y mi cristalina torrentera
salpicará las ya almas blancas
de mi alamillo querido
de puntillas sobre el agua.

Y mi corazón malherido
descansará
allí donde los vientos,
por no tocarle, se calman.

Y correré por el peligro,
ajeno a las llamadas,
porque ¿qué importa morir
si no se ama nada?



Te busco


En la brisa de la noche
busco el aroma de tu cuerpo,
en cada leve roce...
de tus labios, un beso,

en cada rumor, un susurro
de tu pensamiento...
la sonrisa que se te escapa
en los centelleos del cielo...

Y ni te rozo, ni te veo,
ni puedo escucharte,
ni te siento.

Te busco en la fantasía
y el ensueño...
mas, no te encuentro.

Y me olvido buscarte
en el mundo entero...



Lo que tú me dices


Dijiste: mírame!
Y te miré
Dijiste: cuídame!
Y te cuidé
Dijiste: ámame!
Y te amé

Con el tiempo
dijiste: Olvídame!

Y con el tiempo
te olvidé …

Ya ni te miro,
ni te cuido,
ni te amo …
¿preguntas porqué?



Resurrección


Tengo un negro cáncer
que me come el alma,
la tristeza me estrangula
ya no quiero respirar…

El odio es la savia
que alimenta los espinos
que crecen por mis venas.

Poca razón, todo rabia,
negándome al destino,
llorando solo penas…

Mi muerte fue el amar,
me devoró con gula,
roto, oscuro, en calma…
al fin… ¡nuevo amanecer!



Sólo un beso


Un beso he de darte,
cuando ya no más pueda verte
y que el beso
diga lo que por amor
día a día mi alma
ha de callarse,
por tenerte cerca
y no tenerte…

Un beso he de robarte
cuando ya no más pueda verte,
cuando el alma
busque su descanso
y ya no quiera seguir
viviendo sin tenerte

(Variación)
Un beso he de robarte
para que ya no más pueda verte,
para que el alma busque su descanso
que ya no quiero seguir viviendo sin tenerte

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hondo calan estos versos en el alma
y la rima suave los desplaza
hacia un fondo común de pura raza
que los vuelve a la música que ama
una tierra que es vida y nos alcanza.
Y el tierno corazón de Extremadura
los llora y los abraza
y el vuelo de un albatros con su fuerza
nos recuerda una tierra de ternura
y nos remonta al cielo con bravura
para verla más alma y más extensa
con los versos que salen de tu pluma.

Arañuelo.

Anónimo dijo...

ENTRE MELANCOLÍAS Y TINIEBLAS.
Poema a Gody.
Sobre el cristal dorado de la tarde
refulgen pensamientos que reclaman
la cálida lluvia de mi tierra,
y hay un Júpiter tronante en mi memoria
que descarga feroz mi desamparo;
y me llueven, amor,tantos recuerdos
que me pasa la carga de tu ausencia.
Y la Égida fulgente de mi llanto
me envuelve en cromosomas de amargura
y desplego mi noche en un suspiro
que Agamenón me corta con su espada
y una diosa de azules me requiebra
y ya no encuentro el norte de mi vida;
Pero miro en la noche las estrellas
y en su fulgor de plata te distingo
palpitante de rosa y tulipán
y recuerdo que tengo en mis entrañas
un beso desprendido para ti;
y se llena la aurora de violetas
y me cubre de azafrán esta cuartilla
donde pido el amor y la palabra
para romper tinieblas de mi vida.

Jerte.

g0dy dijo...

Gracias Jerte por tus versos.
Me encanta la figura "y una diosa de azules me requiebra"

g0dy

Anónimo dijo...

LOS BRAZOS DE LA NOCHE.
Hoy tiemblas en mis brazos noche mía
y por eso presiento que me adoras
aunque empujada por el alba
te apresuras a huir,
dejando aquí a este amante
que embriagado de ausencias te suspira.
Veo como inclinas tu cuerpo hacia poniente
llevándote en la capa las estrellas.
¿Qué me dejas, amor?
Acaso un lucero retrasado
que ignora tu belleza
y que también me ignora a mí.
La soledad me inclina a imaginar,
pues a veces, tú con tu silencio,
me obligas a llamarte,
y no contestas.
De tu silencio escojo mis poemas,
que suelen ser olvido para el mundo.
Pero creo me asiste la certeza
que detrás del silencio hay poesía,
poesía del misterio y de la noche,
aunque mi amada ignore que la quiero.

Piedra Caballera.

g0dy dijo...

Querido Arañuelo,
que en tí no prenda el desconsuelo.
El tiempo corre a destiempo
en nuestras vidas,
y a veces uno se olvida,
de agradecer a quien con esfuerzo,
con tiempo, cariño y palabras,
hace poseía con versos
que dan ánimos al alma.